Altriman. “El final de una leyenda” . Jul 2015

Desde que nacemos, nuestro cerebro desarrolla un eficaz mecanismo de alerta contra los peligros de nuestro entorno, el miedo. Un miedo instintivo e irracional, a la oscuridad, al dolor, a la soledad, al abandono, a las lentejas de mi madre….., y otro miedo impuesto y adquirido con los años, el “miedo a lo desconocido” que nos impide hacer locuras, pero que a la larga se convierte en un autentico corsé que nos impide ser libres y vivir intensamente!!. El miedo, una garrapata enganchada en nuestro corazón que se resiste a su ablación, cuando se activa nos domina, nos somete, nos teletransporta a la infancia donde somos vulnerables, manifestándose con distintos nombres: el hombre del saco, el coco, el diablo…metoh kangmi (el Yeti).

            Casi sin tiempo de recuperarme del torbellino emocional del IM de Australia, me quedaban 45 días para enfrentarme al “main course” de la temporada, el que dicen es el IM más duro del mundo, un infierno físico y mental a 3 horas en coche del paraíso. Les Angles, hogar del Yeti y enclave del Altriman: 3800 swim a 1,200m, 197 km bici (7 puertos) con 5,010m de desnivel y 42km run con 800 de desnivel. Cuenta la leyenda que el Yeti te intimida en la oscuridad de la natación, te humilla y destroza psíquica y físicamente en la bici y esparce tus despojos durante la mataron. Cuando dices a otros que lo harás recibes un… bufff!!! por respuesta. Confieso que estas cosas en realidad me ponen.. y mucho!!.. Nunca disfrutaras de la satisfacción de alcanzar algo extraordinario que se esconde detrás de la puerta si no intentas abrirla!!. Sin embargo, debía seleccionar cuidadosamente mis armas para enfrentarme al temido Yeti. Un reto de estas características requería un meticuloso entrenamiento físico pero sobre todo mental, debes estar preparado para la caprichosa e impredecible climatología de la alta montaña, para mantener la serenidad, confianza y optimismo es las situaciones más extremas. Pasé muchas horas empollando videos de youtube y crónicas de ediciones anteriores, visualizando los puntos críticos de la carrera donde por ningún motivo debía de dejar de ser yo mismo, desglosando el recorrido del Altriman en objetivos y metas volantes que reforzasen mi confianza…y debilitasen la de mi adversario.

Convocatorias de swim Matiner cada día más pronto!!.. en una frenética persecución del amanecer en su retirada hacia el Norte, 6:15, 6:00.. 5:45.. La teniente Amanda Ryan no daba abasto convocando un día sí y otro también. Algunos días en los triángulos del Pádel a las 6:30 había más tráfico que en la Ronda de Dalt en hora punta. Pasamos momentos únicos de entrenamiento de swim, luego en la orilla te esperaban sonrisas, croissants, fruta…. Qué maravilla!!. Con alguna intentona independentista de la fracción matinera de Sant Pol (no nos dejan convocar, ni tampoco votar!!!) … que risas!!!. En un acto que le ennoblece, el ayuntamiento de St Pol me regala un caramelito en forma de boya amarilla a escasos 92 metros de mi balcón en la Punta de St. Pol, para no hacerles “un feo”, repasaba nadando sus boyas en circuitos de 3000m Hub-faro de Calella-Hub. Por exigencias del guión del Altriman (primera vuelta de 1900 de noche), en ocasiones me auto-convocaba a las 05:30 en solitario.... con más acojonamiento que ganas y con una boya naranja en la espalda me echaba a nadar en la oscuridad..

 Alternaba mis entrenamientos de swim con tiradas largas de run de montaña (muchas de ellas en transición) de no menos de 15 km, perdiéndome en incontables cambios de ritmo en solitario por basuras, Turó de Migjorn, Hortsavinya, Can Carreras, St Cebria. Siguiendo los consejos de Sir Pep Carreras: “entrena les pujades”!!!,.. Además, para el combate cuerpo a cuerpo contra el Yeti debía saber cómo enfrentarme a sus aliados, así que buscaba en particular los días chungos de lluvia, viento o mucho calor.

Pero sin lugar a dudas el grueso de la preparación se la llevaba la bici. Sabía que con los IMs del último año tenia volumen suficiente como para llenar todas las piscinas del Maresme, pero necesitaba altura, desnivel y largos entrenamientos en solitario. Menudo pollo el que me montó mi Mónica Cervelo (está como una cabra!! ) cuando le digo que tengo que cambiarla por la joven, sexy e insaciable Jennifer “Eva” Cannondale. Con Jenny (como le gusta que la llamen), compenetramos a las mil maravillas, devoraba kilómetros y kilómetros, disfrutaba y era más ardiente cuanto mayor era el desnivel. Yo no hacía más que hacerla feliz!!..entre semana la complacía con su menú preferido: Series de subidas a Collsacreu (x4) y de postre Font del Montnegre ( que ocasionalmente repetía..) o series de subida a Basuras (x4) y de postre Can Carreras con nata. Algún día me pedía un caprichillo después de entrenar…subir a Castella d´Indies o Can Palau.. yo, por supuesto, la complacía.  Pero los fines de semana Jenny se olvidaba del régimen, Los sábados nos perdíamos por el Montseny con mi amigo Toni Cervero ( plato grande en la bici, plato pequeño en la mesa!!!) y Javi Alvarez ( con todo su repertorio de goma espuma!!)..Rutas de 120-130 Km con “final feliz” en forma de Font del Montnegre de postre (Jenny contentísima!!). Creo que el entreno de calidad era subir con estos dos a Antenas y Turó de l´home a ritmo y riendo a carcajadas. Gracias chicos por enseñarme a bajar “a tumba abierta”, pero sobre todo por enseñarme que el ciclismo es mucho más que un deporte. Muy grandes en el reto 333!!!. Los domingos tocaba salida en solitario…perdón…con Jenny. Siguiendo los consejos del Mister, tenía que mantenerme una buena parte del entrenamiento por encima de los 1000 metros para adaptarme poco a poco a la altura (Gracias Santi, una vez más la has clavado!!). Series de inicio en Fontmartina (1000 m)- Antenes – Turó de l’home. Pasábamos 3-4 horas haciendo triángulos -como en el mar- y vuelta a casa, yo muerto de hambre, Jenny empachada..

Faltan 15 días para el Altriman, y a pesar de que estaba convencido de que el Yeti era capaz de leer mis pensamientos, decido ir a reconocer el campo de batalla. En palabras de Pep Carreras: “No hacer el circuito de bici antes de la cursa es un suicidio” .. y razón que tenia. Dos días de “stage” en Les Angles; primer día swim en el lago y el “bucle pequeño” (el circuito de la Half), segundo día el resto del circuito de bici… Subo los 7 puertos cuyos nombres me aprendo de carrerilla y tomo nota de las distancias y desniveles, puntos de avituallamiento, tiempos estimados, hago mil esquemas del recorrido. Acabo y…mi acojone era mayúsculo!!..solo pensar en la distancia (197Km), desnivel (5010m), número y disposición de los puertos (lo más duro empieza en el Km 145), me entran escalofríos.. aunque disimulo para no ser descubierto por el innombrable. La clave estaba en la dosificación y segmentación del Altriman: swim en dos partes (primera vuelta de noche, segunda de día), bike en tres segmentos. 1ra de la T1 a Mijanes km 70 (tiempo estimado a las 3 horas), 2do. de Mijanes a Gesse  Km 145 (a las 6 h30), 3ra. de Gesse a la T2 Km 197 (a las 9h 30), run en 3 partes; 1ra. 12 km “planos” a 5:10 km, 2da del Km 12 al 23 caminar a ritmo en tramos de cuesta muy pronunciada y correr a 5:30 el resto, 3ra del Km 23 al 42 , 12 km bajada a 4.45- 5:00 y 7 km de subida suave a 5:30.

Me planto en Les Angles el jueves a media noche, duermo de un tirón hasta las 7:00 (raro en mi) ..La predicción para el sábado era de calor intenso que llegaría a los 36 ºC, así que tenía que estar más hidratado de Bob Esponja. Comida “Teamera” en pizzería del pueblo, riendo entre otros con Paco, Kiki, Albert su familia y el tío cachondo del frigodedo ( que según él me vendrá bien para las almorranas tras 10 horas de bici). Recogida de dorsales, veo a Stefano y nos deseamos suerte, dejo a Jenny (cabreada por deshincharle las ruedas) en la T1, briefing y al hotel que me esperaba un día muuuuuuuy largo. Recibo muchos whatss y mails de ánimo de amigos y compañeros del Team .. GRACIAS!!, Gran arenga motivadora de Raül MUCHAS GRACIAS!!... Después de dos semanas de estar al límite del sobre entrenamiento y con cierta tensión, por fin me encontraba relajado y sereno, con la consciencia de estar preparado para la batalla. Afilo mis cuchillos, preparo el material, me pinto la cara, hago un pipi y a dormir…

04:00 Salto de la cama, antes de que mis pies toquen el suelo me llega un whatss de la teniente Ryan “Carlos, ha llegado el momento!!... El Yeti se va a enterar!!”.. Luego un mensaje de voz de mi hija Mireia, que con 5 frases consigue emocionarme y llenarme de moral. Pienso, "he tenido mucha suerte en mi vida, soy feliz y tengo una vida estupenda"…hago recuento de mis armas: confianza, seguridad, alegría, optimismo, amor, valor, amistad, compromiso, esfuerzo y determinación.. estoy preparado… ahora vamos a cargarnos al puto Yeti..!!

04:50 llego a la T1, noche cerrada, me pongo el frontal, busco a Jenny (que sobaba como un koala) le hincho las ruedas, coloco el material, y me enfundo el neopreno. Kiki, la que nunca falla, estaba allí apoyando. Me da un abrazo y me dice: Enjoy!!.. no tinc cap dubte de que ho aconseguiràs!!. Veo a Stefano y Anna nos abrazamos y nos dirigimos al lago, 05:20, 10 minutos para la salida y me doy cuenta de que me he dejado el Garmin en la T1, corro como puedo a buscarlo, llego nuevamente en plancha a la línea de salida, me coloco entre los primeros hacia la derecha, no se ve nada!!. Encienden la luz de la grúa de orientación al otro lago del lago y marco mis enfilaciones para no perderme. La emoción es máxima, cuantas veces había soñado con este momento!!.. suena la música y se encienden las antorchas rojas, piel de gallina y … BOOOOO!!!.. nado muy cómodamente deslizándome con suavidad en medio de la penumbra absoluta, a partir de los 200-300 metros empiezo a apretar, muy buenas sensaciones y aprieto un poco más, mis referencias no fallan y me dirijo en línea recta hacia la luz, antes de llegar a la primera boya me veo seducido por un amanecer espectacular, doble giro de boya a la derecha y de vuelta enfilo hacia la luz de llegada, voy muy bien posicionado, demasiado bueno para ser verdad. Miro hacia estribor y observo una gigantesca mano blanca cuyo dedo medio avanza hacia nosotros y amenaza con partir el lago en dos. Me apresuro a buscar más referencias en tierra ya que la niebla nos cogerá con su puño en cualquier momento. Sin duda alguna se trataba de una de las manifestaciones del Yeti que intentaba intimidarnos a las primeras de cambio. Pero no había que mostrar ningún signo de debilidad. Aprieto el ritmo para evitar la niebla, pero me da caza. Sigo nadando con el mismo ritmo y la misma dirección “ a ciegas” solo hay uno 5 metros de visibilidad, me encuentro a dos gorros naranjas flotando desconcertados, les digo: Va!!.. seguirme!!.. la niebla cada vez más densa me impide ver a mis perseguidores, aunque los escucho. Mantengo rumbo y ritmo hasta toparme de morros con la boya amarilla de giro final y salgo del agua 31min 45, enfilo la pasarela para la segunda vuelta y …STOP!!  Se para la prueba por la niebla, en medio de un gran desconcierto y caos, a los 20 primeros nos dicen que esperemos en el parque de bici en nuestro número sin quitarnos el neopreno. Estaba congelado!!, 32 tíos se habían perdido y los traían en un autobús y a uno lo encontraron al borde de la hipotermia 2 horas más tarde!!..45 minutos más tarde, en medio de este pollo y haciendo un alarde de organización sin precedentes, nos dicen que votemos “a mano alzada” si volver a dar la segunda vuelta o dar una vuelta corriendo de 2 km. Con el frio de cojones que hacía y con un pavo perdido en el agua gana de calle la propuesta de los 2 km. Me visto de ciclista con manguitos y bambas, Jenny me dice. “ y esto que és?” y en medio de risas y cachondeo salimos corriendo en estampida, vuelvo a la T1.. yo seguía tiritando de frio!!, me calzo las zapas de bici, cojo a Jenny más hambrienta que nunca y comienza la gran aventura…

Primeros kilómetros en dirección del Coll de Llose, intentando comer algo a pesar del tembleque de mi mandíbula por el frio. Tras rodar 7 kilómetros empieza la ascensión de unos 4 km al 6% (como subir a Collsacreu). Una vez coronado (Km 13)  le sigue una bajada tan rápida y divertida como peligrosa, con algunas curvas cerradas. Llegado al fondo del valle ( donde hace una rasca que no veas..) se cruza un puente semicircular y empieza una ascensión fácil que en algún momento te permite incluso poner el plato grande. El ritmo de todos parece el de una cicloturista, conocedores de que esto no es, ni mucho menos, el aperitivo de lo que nos espera. Las vistas del valle son espectaculares, desde una carretera estrecha y sinuosa que se curva hacia la izquierda en dirección del poblado de Riulleau. Miro hacia lo alto de la montaña y me parece ver a un gigante con los brazos cruzados que con sonrisa condescendiente parece decirte: “ya verás lo que te espera”. Sigo comiendo cada 30 min y bebiendo cada 20, dosificando líquidos y comida, ya que los avituallamientos están a cada 25 km. Casi de forma imperceptible se va incrementando el desnivel a medida que se visualiza al fondo el Coll de Creu, Km 35, el Yeti nos suelta algunas migajas en forma de series cortas de rampas al 10-12%. Un tal Cedric me adelanta con una batidora entre los pedales a muy bien ritmo, todos los que somos adelantamos por él, le observamos, sonreímos y le copiamos. No estaba dispuesto a regalar ni una sola pedalada de más. Tras dos zigzags se corona el Coll de Creu donde hay un grupete de gente animando en plan cheerleaders . Bajamos a toda pastilla hasta el Lac Matemale  y de allí voy lanzado hacia Formigueres, en esos momento echaba de menos no tener a mi Mónica y sus acoples. Iba muy rápido aunque una voz desde el fondo me decía: ”regula , controla, dosifica”. Desvío hacia la derecha en Formigueres y volando hacia el cruce que separa el Altriman de la half. Giro hacia la izquierda y subida continua hacia Querigut , 7km al 6-7%. La niebla era espesa con 10 metros de visibilidad, y con el tráfico abierto en cualquier momento te podía aparecer un coche en sentido contrario. Querigut Km 65, bajada rápida con muy buen asfalto en dirección al primer punto de control y de avituallamiento personalizado de Mijanes, llevo muy buen ritmo de carrera y me lo estoy pasando de coña, pero sé que en tan solo 5 km empezará la ascensión al temible Coll de Pahieres (puerto de primera categoría del Tour de Francia). Mijanes (Km 70 a los pies de Pahieres) miro el garmin y llevo 30 minutos de adelanto sobre lo que me había marcado, iba física y mentalmente acelerado y si no relentizaba sería cuestión de tiempo caer en las redes del Yeti. Paro en el avituallamiento, y devoro todo lo que veo a la vista, casi sin masticar, tenía muchas ganas de empezar a subir a Pahieres, estaba al borde de la abducción total cuando escucho la voz de un ángel que me pregunta: ¿cómo estás?.. respondo: muy bien!!.. de coña!!..y me dice: “pues tranquilo y come despacio”.. no solo era lo que me decía, era el cariño que contenían sus palabras lo que me hizo pensar. Empiezo mentalmente como un toro la subida al Coll de Pahieres 10 km con una media de 8,5% de desnivel y rampas del 10,5%, continuos sin respiros ni descansillos. Las vistas son increíbles, pero había que mantener la concentración. Primeros 4 km bajo una espesa niebla y lluvia fina, una vez pasados llegas a una caseta de control donde una ambulancia atendía a las dos primeras de las muchas víctimas del innombrable que me encontraría por el camino. Tras la niebla, empieza la primera cadena de largos zigzags donde el sol empieza a apretar y el grupo que salimos de Mijanes a alongarse progresivamente. Empieza la segunda serie de zigzags cortos pero de un 10% de desnivel. Siento una voz ajena a mi pero que viene de mi interior que me dice: ¿y ahora qué..guapo? me abstraigo, miro hacia el asfalto y visualizo los zigzags que van de Fontmartina a Antenes que tantas y tantas veces había subido. Se acaba la vegetación, un sol de justicia mucho calor y te recibe la tercera cadena de zigzags. A lo lejos ya se visualiza a la gente en la cima del puerto, intento motivarme con las inscripciones del asfalto “ Vamos Contador”, “Andy” , “ Anims Purito”, pero solo son geles de muy corta duración. Faltan 2 kilómetros para coronar el puerto, me vienen a la mente las palabras de mi hija de esa mañana: “Papo, recuerda, tu puedes con todo”, aprieto los dientes mientras cierro los ojos de los que se escapan unas lágrimas, y empiezo a sonreír, súbitamente se eleva mi moral y mi cadencia, y voy lanzado a coronar Pahieres, con la certeza de haber vencido la primera batalla psicológica del Altriman. Una multitud te recibe con aplausos y vítores en varios idiomas. Nuevamente me abalanzo sobre el avituallamiento, y una vez más una voz en forma de caricia…” tranquilo…come despacio, bebe…tranquilo”. Me subo los manguito, me cierro el cortavientos y a bajar “a tumba abierta”. Una larga bajada con zonas de muy mal asfalto y vacas que amenazan con cruzarse en cualquier momento en la carretera. Lo nunca visto!!, yo adelantando gente en la bajada. Tras 12 km de bajada continua a gran velocidad te desvían hacia el cuarto plato del día, el Coll de Chouila. “Solo 5 Km” al 7% de media, con rampas del 8,5%, que se hace muy pesado por el sol y el calor. Coronas el puerto con la mente puesta en la larga “bajada” de casi 20 km que te espera. Nada más empezar la bajada me topo de golpe con una viejo conocido… exacto: el puto viento!!!. A pesar de la pendiente negativa, no dejabas de pedalear como un poseso, esto no estaba en mis planes, ni en el catalogo, ni en la letra pequeña!!!. El Yeti me la quería jugar en el terreno que yo menos me esperaba y que menos había entrenado. Estaba más seco que una mojama, hago un amago de acoplarme y tiro como puedo hasta el siguiente avituallamiento. Mientras bebo coca-cola e isotónica, un hombre mayor me pregunta: “¿¿quiejes pizza??”..” la he hecho mi señoja”.. yo flipaba… “pos zi!!” le respondo, noto que vuelvo a estar acelerado mientras degluto salvajemente la pizza que me sabia a gloria. Me digo “ Va, Carlos , tranquilo que estás haciendo un carrerón” aunque en el fondo sabia que lo peor estaba aún por llegar. Km 120, tras una corta bajada de sinuosas curvas a sotavento ( por fin!!) te obligan de golpe a girar hacia la izquierda para embestir lo que en la web de la organización llaman “una patada en el culo de 1,5 km”.. parecía más una patada en los huevos.. pero bueno. El cambio de ritmo era tan súbito que costaba hacer el cambio de marchas, parecía una escalera en caracol de casi 2 km con una pendiente del 12%. Al final del tramo, coronas el inicio de la meseta de Sault donde te recibe el viento del Norte con una bofetada, 8 km de toboganes con viento en contra. Sabes que te acercas al momento de la verdad, a Gesse (Km 145) punto más bajo del recorrido donde empieza realmente el Altriman. Le precede una bajada con curvas muy peligrosas, “ confianza y seguridad” dos palabras que no dejaban de resonar en mi cabeza mientras bajaba. Llego a Gesse (6h 31 min de bici) lo había clavado!!, te reciben entre aplausos como si hubieras llegado a la meta!!. Cojo mi avituallamiento personalizado y como 4 bocados de la tortilla de pasta que había preparado, el resto comía tupers de pasta o arroz, si no comes así estas muerto. Empiezo la subida a la morada del Yeti, el Coll de Garavel “ el tapado de la ruta”, 3 km al 7%, seguido de 3km al 11% y un “ falso llano” del 4 km 6,5%. Con la tralla que llevamos es aquí donde la mayoría empiezan a caer como moscas. Adelanto a penosos cadáveres rodantes poseídos por el cansancio y la decepción. Algunos que me habían adelantado antes de Pahieres, ahora empujaban penosamente sus bicis. Tramo del 11%, me siento confiado y fuerte, miro la siguiente curva pensado “ seguro que es la última con este desnivel”.. sé que no es así, pero me ayuda. Por primera vez veo los primeros signos de debilidad del Yeti, he aprendido mucho durante el camino, la clave es la confianza. A mí me fortalece, a él le debilita. Doy alcance a dos tios supercachondos del Masnou, entre risas y optimismo encriptado subíamos convencidos de que esto lo teníamos en el bote. Va!! Nois la propera rampa será l´ultima!!! Jajjaja. Maquillábamos el sufrimiento con sonrisas y chistes tontos: “quien se tira un pedo pierde”!!..jajjaja. Esto empezaba a desquiciar al Yeti. Dejo atrás a los del Masnou y enfilo en solitario hasta la cumbre del Coll de Graravel, piernas cargada y el sol en la cara, siento como si alguien me cogiese del sillín, no quiero mirar atrás, es el Yeti, me meto un gel bebo agua y sigo, sé que lo conseguiré!!, estoy convencido. Corono un puerto con un Uuuuhhuuu!!!  A lo Anna Rovira. Bajada de un Km otro “puertecillo” de 2 km 6% (Coll de Moulin” y a bajar un espiral de curvas a gran velocidad. Escuchas las piedras del rio que te anuncian que ha llegado el momento de “atarse los machos”. Km 178, cuando en cualquier IM estas pensando en bajarte de la bici para empezar a correr, aquí te regalan el muro de Carcanieres y la subida a Querigut!!. Parece que todos lo anterior ha sido un entrenamiento para llegar en condiciones a este momento. Acaban las curvas, giro  a la izquierda y empiezan los zigzags. Físicamente muy justo, mentalmente pletórico. Mi alma alimentaba a mi cuerpo, subía saludando y sonriendo a la poca gente que animaba. Por primera vez el yeti aparece a mi lado, ya no es tan grande, ya no me parece tan fuerte y lo más importante, ya no da miedo!!. Subo a ritmo a pesar del incremento del desnivel, visualizo las veces que subía con Jenny a la Font del Montnegre después de una tirada larga. El yeti intenta sacudirme para despertarme de mi abstracción. No lo consigue, subo adelantando gente, aprieto los dientes, respiro muy hondo pero no me levanto de la bici para no dar el menor signo de debilidad. Leo en el asfalto aquello de “ la locura es la única cosa de la que no te arrepentirás jamás”. Llego a Carcanieres, esto casi esta hecho, giro a la izquierda y subida a Querigut.. “Cap problema” “esta chupao” me digo, luego corta bajada y Querigut. En el pueblo te reciben como a un héroe. No paro, me encuentro fuerte y confiado. 5 km más de subida y la bici del Altriman la tendré en el saco y con ella al puto yeti. Lo consigo!!.. bajada y hacia la nacional que tocara pedalear 15km en falso llano hasta Les Angles. Plato grande, voy muy rápido, miro la hierba de los campos y… si!!! Viento a favor!!!, siento tras el oído un “ole..ole..ole..” mi otrora enemigo me estaba catapultando a la T2. Aprieto con rabia!!! Había batido al Yeti en su casa con un tiempazo ( 9h35min), pero aun seguía vivo, tenía que liquidarlo en la maratón.

Llego a la T2, veo a Raul Coll, le grito “que pasa Raulete”!!, muchos compañeros del Team animando!. Ana me pregunta si he visto a Stefano, le digo que no. Transición muy larga, quería tomarme mi tiempo y disfrutar del momento. Un tio sentado al lado mío, me dice, “ha sido una locura.. yo seguiré caminando”. Me calzo las bambas y empiezo a correr. El Yeti no se había rendido, que va!!.. noto un dolor intenso en la planta de los pies tras los primeros pasos. Pienso “ tranquilo, es normal, ya se pasará” creo que el primer km lo hice en 8 minutos, pero antes de llegar a la presa ya había desaparecido. Llego al otro lado del lago y veo que corro fácil a 5:10, así que mantengo el ritmo mientras disfruto del atardecer del lago… que maravilla!!. Paro en todos los avituallamientos, bebo un sorbo cocacola-iso-agua en ese orden. Subo corriendo la urbanización, arriba te controlan el número y de vuelta a la base náutica. Adelanto a mucha gente que había visto en la bici. Cerca del restaurant escucho una voz familiar que me dice: Carlos!!!, era mi amigo Bruno que había venido a verme y de paso hizo la half ..que grande!!.. me dice: que no puedo seguirte cabron!!!.. eres un maquina!!.. dicho por él que ha dado la vuelta al mundo a vela en 3 meses es todo un halago. Nos abrazamos, sigo y veo saltar a la Chulvi.. Caaaarlos ¡!!!!, Isam, como siempre me pregunta como estoy, le contesto.. muy bien!… de coña!!..veo a Paco, Gerard, Mikel y un puñado de compañeros del Team animando. Mantengo ritmo y sonrisa hasta el Km 12. El yeti corre al lado mío, pero su presencia ya es solo testimonial, se le ve triste y demacrado y va perdiendo pelo  a medida que caen los kilómetros. Subo al pueblo y veo un coche de la CIA… Pienso , “ joder!!.. si está aquí el mismísimo Obama”, me acerco más y eran Raül y Amanda, nos saludamos. Amanda salta del coche y corre conmigo unos metros  ..“ como estas”?.. Genial!!. Sigo, camino con energía la primera cuesta de 50 metros a la derecha tal como lo había planificado, sigo corriendo. Veo a un grupo del Team en el Polideportivo que me animan. Albert me examina desde la distancia y me pregunta : bien?... y lo respondo…no, muy bien!!!.. Esta era el arma para matar definitivamente al Yeti: optimismo, positividad y determinación. Km 14, quedaba la rampa de 1,5 km al 10% , la subo andando a ritmo, balanceando enérgicamente los brazos, dando amplias zancadas, de hecho voy adelantando gente que corre de puntillas. Esta era la forma de cuidar los gemelos para que duren hasta el final de la maratón. Llego arriba, devoro todo lo que me ofrecen en el avituallamiento y nuevamente aquella voz que me había acompañado –y salvado- durante la bici, “come despacio, esto lo tienes hecho”. Me inunda una gran serenidad, bajo al lago cantando el estribillo de “hold my hand” ante las risas de los que subían. Subo al lago en el que se reflejaban los pájaros y las montañas. Punto de “turn around”, me cogen el número y me preguntan: “ ¿necesitas algo”? y contesto “si.. una moto” y nos descojonamos. De vuelta a subir, sabía que era una de las últimas subidas… y sigo cantando. Subo y me cambio de ropa, GRACIAS TORO!!!... a partir de aquí tocan casi 12 km cuesta abajo, recuerdo como la bajábamos hace 2 años con  Albert cuando llegamos juntos en la half. Zancadas largas y disfrutando. Saludo a otro grupo del Team: Santi, Josep, Paco. Raül e Isam ( que me traía ropa para cambiarme) corren unos metros conmigo mientras Raül me hace un video..el cariño de mis compañeros me hace más fuerte, me encuentro fenomenal!!.. Km 24, Joan Gras Jr me ofrece una Sprite, le pregunto si mejor no tiene una birra, nos reímos y sigo. Me cruzo por primera vez con Stefano, nos abrazamos, me dice que ha tenido rampas, pero que acaba como sea.. Con un par de cojones!!!. Las palabras de Stefano hace tambalear por primera vez al Yeti, que ahora parece tener menos pelo que mi amigo Oriol Fogueras antes de una cursa ( u know what I mean). Sigo hacia la base náutica, la presa, subo la urbanización. Mantengo ritmo y determinación, de vuelta ya para el pueblo (Km 37), otros participantes con los que me cruzaba me empezaban a felicitar. Incremento el ritmo, era el momento de darlo todo. Me tomo el último gel y me emociono visualizando la llegada al pabellón. Km 40, el yeti se ha convertido en un hombrecillo calvo, en un Golum que corre/camina torpemente detrás mío. Ultimo km, esta anocheciendo, enciendo mi frontal. Cojo al yeti del cuello y le digo con una sonrisa, “gracias por darme la carrera de mi vida”. Es entonces cuando cae de rodillas, coloco su cabeza en la guillotina, sin dejar de correr. 300 metros para la meta y veo una luz que se acerca hacia mi diciendo: Carlo ¡!..era Stefano, le faltaban 15 km, nos fundimos en un abrazo “ lo vamos a conseguir”!!!... en ese momento cae la guillotina. Recojo la cabeza del yeti, a 100 metros estaba mi meta emocional: mis amigos!!! Chulvi saltando, Isam corriendo, Kiki corriendo con una caja de pizza, Amanda y Romà.. “ que pares tio..que no te seguimos”.. !!! Raül gravando, Santi aplaudiendo a mi lado. Caminamos unos metros .. a ritmo!.. cantando “Team Calella oooeee…Team Calella oooeeee…Albert me dice: “disfruta de tu momento”!!!. Había que rematar la faena, últimos 100 metros de la carrera de mi vida y pensaba sprintarla.. entro en el pabellón levantando las 2 manos (“6”). Estaba culminando mi sexto IM (el primer extreme IM del pocker). 14h 39 min, 4:32 en la maratón. Subo al arco de llegada para agradecer a todos su apoyo, saltando, cantando y aplaudiendo. Me sentía feliz…. Muy feliz!!!

Gracias Team!!, entre todos hemos acabado con la leyenda.

Carlos

PD: Me he enterado que un primo del Yeti, un tal Norseman, va haciendo de las suyas en los fiordos Noruegos, si tengo suerte, el año que viene le haré una visita….